Fue hasta hace dos meses el Director del Fleni, Instituto de Rehabilitación y Educación Terapéutica, pero renunció al cargo para coordinar los proyectos comunitarios de la institución, que investiga y ayuda a niños con autismo.
Actualmente hay mucha controversia con respecto a la relación entre la aparición del autismo regresivo, (el que surge en niños que hasta los 12 o 18 meses habían tenido un desarrollo típico de la edad), con el mercurio contenido en alguna vacuna, como la de sarampión, paperas y rubéola. ¿Cuál es su posición con respecto a estas posturas?
Siempre hay que tener en cuenta la biodiversidad del individuo. Hay algo complejo que es una combinación de predisposición y quizás la capacidad que tiene un organismo, hoy en día, de soportar un montón de desafíos. Hay estudios que encuentran factores que señalan a determinada vacuna como responsable, la más conocida es la MMR.
Esa vacuna tiene thimerosal, que contiene un alto porcentaje de mercurio ¿esa es la sustancia que causa el daño en el sistema inmune?
En realidad hace unos años había diez vacunas, hoy hay más de treinta, y a veces son dosis múltiples. Éstas, tienen sustancias conservantes, antihigiénicas, proteínas, aluminio, formol aldehído y thimerosal. Entonces no es que este último causa el daño, sino una sumatoria de cuestiones. No todas las vacunas lo tienen y por suerte en muchos países ya la están retirando.
A medida que se descubren nuevos antídotos para algunas enfermedades, ¿aumenta la posibilidad de sufrir otras?
Las investigaciones y los descubrimientos médicos, son siempre de gran avanzada y con muy buena intención. A veces después, en el sobreuso, se empieza a generar el desequilibrio. Hay estudios que demuestran que en Estados Unidos o en países desarrollados, únicamente el 10% de los antibióticos se utilizan adecuadamente. Entonces algo que fue muy positivo a los descubrimientos de los antibióticos, por mal criterio, hoy se está tornando casi en un problema. En el autismo el paralelo sería con el tema de las vacunas.
Los casos de autismo regresivo, ¿pueden prevenirse?
Se puede hasta cierto punto hablar de prevención. Lo que se puede hacer, es fijarse que hay vacunas que quizás no son necesarias durante los primeros años. Hay algunas que uno no necesita darlas en dosis múltiples. Vacunar cuando los chicos están fuera de épocas de fiebre, de catarro o de debilidad. Realmente las instituciones más serias no están tomando un rol en esto, porque es difícil y es muy controvertido.
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Hace 8 años
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